Prevención de las ulceras por presion:
Las medidas preventivas incluyen entre otras girar y reposicionar al paciente cada 2 horas. Se deben utilizar camas y colchones especiales para disminuir la presión en sitios susceptibles, extendiendo la superficie de apoyo, disminuyendo con ello la presión generada por el propio peso del paciente.

Se debe actuar en varios niveles:

1-     Cuidado de la piel: Mantener la piel limpia y bien hidratada, usar agentes limpiadores suaves, evitar la fricción excesiva y utilizar agentes humectantes no basados en alcohol.

2-     Reducción de la presión: Es de vital importancia mantener la capacidad funcional por medio de terapia física y/o ocupacional. En Pacientes confinados a una cama se debe colocar la cabeza elevada, el cuerpo lateralmente inclinado con las caderas y hombros también flexionados en posición supina y una almohada entre las piernas.  Debe ser reposicionado cada 2 horas. Son muy útiles los colchones de aire o agua, además de otros dispositivos disponibles comercialmente.

3-     Nutrición: Es importante para mantener la integridad tisular el  realizar una evaluación nutricional para mantener una ingesta óptima en calorías y calidad de nutrientes, ya sea en forma enteral o parenteral.

4-     Incontinencia: La incontinencia urinaria o fecal debe tener una evaluación adecuada para tratar de identificar si existen causas reversibles, ya que la solución de este problema previene la maceración de la piel y la limpieza excesiva y agresiva. En caso de ser irreversible realizar limpieza a intervalos apropiados, utilizar materiales absorbentes y barreras dérmicas.

5-     Educación de familiares y responsables directos en el cuidado del Paciente, pues los cuidados de los familiares sumados a la labor del Personal de la Salud (Enfermeras, Médicos, Terapistas, etc.) conseguiran mejores resultados y una recuperación más rapida del Paciente